Mitigación del metano en la COP28: 4 criterios para evaluar los compromisos sobre el metano en la mayor cumbre mundial sobre el clima
Este artículo forma parte de nuestra serie COP28. Más información sobre CATF en la COP28.
Reducir la contaminación por metano es la mejor estrategia que tenemos para frenar el cambio climático en las próximas dos décadas. ¿Por qué? Para empezar, aunque el metano es un gas de efecto invernadero de vida corta (20 años), tiene un potencial de calentamiento más de 80 veces superior al del dióxido de carbono. Además, es el segundo gas que más contribuye al cambio climático, responsable de aproximadamente medio grado del calentamiento actual. Por ello, es fundamental reducir drásticamente las emisiones de metano para alcanzar los objetivos climáticos mundiales y evitar el impacto climático a corto plazo.
Las emisiones de metano proceden principalmente de tres sectores: los combustibles fósiles (petróleo, gas y carbón), la agricultura y los residuos. La buena noticia es que tenemos soluciones fácilmente disponibles para reducir las emisiones de metano de los tres principales sectores emisores. De hecho, con las tecnologías disponibles actualmente, podríamos reducir las emisiones de metano en al menos un 45% de aquí a 2030, lo suficiente para evitar un calentamiento de 0,3 ºC en la década de 2040.
En vísperas de la COP28 y del segundo aniversario de la Promesa Global sobre el Metano -un compromiso histórico de más de 150 países para reducir las emisiones de metano en al menos un 30% por debajo de los niveles de 2020 para 2030- esperamos ver un mayor enfoque en la acción y la financiación que pueda convertir la ambición en realidad en la mitigación del metano. Con este fin, esperamos que en la COP28 se anuncien fondos de entre millones y miles de millones para apoyar la mitigación del metano en los sectores de los residuos, la agricultura y la energía. También esperamos ver nuevos compromisos por parte de países clave, y ya hemos visto uno de ellos: China ha publicado su esperado plan de acción sobre el metano y después ha reforzado esos compromisos en conversaciones bilaterales sobre el clima con la UE. Estados Unidos
La COP28 arrojará luz sobre el sector del petróleo y el gas, sus emisiones de gases de efecto invernadero y su futuro en nuestro sistema energético. La cumbre brinda la oportunidad de emprender acciones que ayuden al sector a convertirse en parte de la solución. En este sentido, las emisiones del sector del petróleo y el gas podrían estar en el punto de mira a medida que los Emiratos Árabes Unidos comprometan a las empresas nacionales e internacionales del sector a adoptar una postura firme en la reducción de las emisiones de metano, la eliminación de la quema en antorcha y la transición a largo plazo hacia un sistema energético descarbonizado.
Sin embargo, el éxito general de la COP28 requerirá que se amplíe la ambición en torno a las iniciativas que se están debatiendo en Dubai y que se dé prioridad a la claridad y la transparencia en torno a las mismas para garantizar que no sólo existe una vía hacia reducciones profundas de las emisiones, sino también la confianza pública de que estas acciones son reales y verificables.
He aquí cómo CATF evaluará las iniciativas que surjan de la COP28:
- Cualquier iniciativa de descarbonización para el sector del petróleo y el gas debe incluir una fuerte participación de las compañías petroleras nacionales (NOC). La mayor parte de la producción y el consumo mundial de petróleo y gas procede de fuera de la OCDE, y ese porcentaje no hará sino aumentar en el futuro. Además, la mayor parte de la producción mundial de las CPN procede de países de renta media y baja. Estos países necesitarán una vía realista para cambiar sus sistemas a medida que crecen económicamente, y esto aún no ha formado parte de la conversación. Las iniciativas en materia de descarbonización deben reconocer este hecho e ir más allá de las típicas Compañías Petroleras Internacionales (CPI) que ya han anunciado acciones para comprometer y potenciar la acción de las CPN de todo el mundo.
- La reducción del metano y de la quema en antorcha debe ser un elemento distintivo y específico del compromiso de la iniciativa. Los firmantes deben comprometerse firmemente a alcanzar al menos un 0,2% de intensidad de metano para 2030, a no quemar gases de forma rutinaria para 2030 y a informar anualmente sobre los progresos realizados en la consecución de los objetivos.
- La transparencia de los datos y la notificación de los mismos deben ser integrales. OGMP 2.0 es el estándar de oro para la notificación de emisiones de metano a nivel de empresa y la iniciativa debe tratar de alcanzar ese nivel de claridad y confianza.
- La iniciativa debe contar con una estructura que pueda perdurar más allá de la COP28 y que incluya representación de las empresas, los países y la sociedad civil. Esto es imprescindible para garantizar el seguimiento de los compromisos, incluidos los informes anuales sobre los avances.
La mitigación del metano es fundamental para cumplir nuestros objetivos climáticos, y la industria del petróleo y el gas tiene la oportunidad de formar parte de la solución. La COP28 ofrece una oportunidad de cambio real, pero es crucial que nuestras iniciativas sean ambiciosas y transparentes, para garantizar un progreso duradero más allá de la conferencia.
