Aumenta el impulso para actuar sobre las emisiones mundiales de metano
Los líderes del G20 aprueban medidas contra el metano; la ONU lanza el Observatorio Internacional de Emisiones de Metano
ROMA - Los líderes de los países del G20 han respaldado hoy oficialmente los llamamientos para reducir las emisiones mundiales de metano con extrema urgencia.
El comunicado oficial de la Cumbre de Líderes decía:
"Reconocemos que las emisiones de metano representan una contribución significativa al cambio climático y reconocemos, según las circunstancias nacionales, que su reducción puede ser una de las formas más rápidas, factibles y rentables de limitar el cambio climático y sus impactos."
Esto crea un impulso de alto nivel antes del lanzamiento oficial del Compromiso Global sobre el Metano en la COP26 en Glasgow el 2 de noviembre. Más de 60 países apoyan ahora el Compromiso, que se compromete a una reducción del 30% del metano en todo el mundo para 2030.
"La reducción de la contaminación por metano se está convirtiendo rápidamente en un punto central de la política climática mundial", dijo Sarah Smith, Directora del Programa de Supercontaminantes en Clean Air Task Force (CATF). "Cuanto más apoyo obtenga el Compromiso Mundial sobre el Metano en la COP, mejor. Una vez que los países se comprometan, CATF y otras ONG, los científicos y los expertos en políticas que trabajan en la reducción de las emisiones de metano están preparados para arremangarse y ayudarles a recopilar más datos, prohibir las prácticas nocivas y aplicar los cambios tecnológicos necesarios para limpiar la contaminación por metano en esta década."
A pesar de las críticas justificadas sobre la falta de avances en la reducción de la inversión en carbón nacional, en la cumbre del G20 se produjeron avances positivos para la agenda climática. Cabe destacar, en particular, la firmeza del lenguaje sobre la contaminación por metano y el anuncio simultáneo de Estados Unidos y la UE sobre la posible inclusión de medidas de intensidad de carbono en el comercio mundial de acero y aluminio.
Además, el Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente ha puesto en marcha el Observatorio Internacional de Emisiones de Metano (IMEO) para mejorar la precisión de los informes y la transparencia pública de las emisiones de metano causadas por el hombre. El IMEO se centrará inicialmente en las emisiones de metano del sector de los combustibles fósiles, y luego se ampliará a otros sectores emisores importantes como la agricultura y los residuos.
"El lanzamiento del IMEO es una buena pieza del rompecabezas en el esfuerzo por reducir la contaminación por metano", dijo Armond Cohen, Director Ejecutivo de Clean Air Task Force."Estamos empezando a ver cómo toma forma un esfuerzo verdaderamente internacional para abordar el metano, un esfuerzo que es la mejor oportunidad que tenemos para frenar significativamente el calentamiento en los próximos 20 años. Sin embargo, es crucial recordar que los buenos datos y las grandes ambiciones son sólo el comienzo. Los países deben aprovechar el impulso para poner en marcha medidas políticas concretas que reduzcan las emisiones de metano."
Los principales científicos del clima han constatado que es necesario reducir las emisiones de metano para evitar que el planeta se caliente más de 1,5 grados centígrados, lo que contribuye a evitar puntos de inflexión irreversibles.
La COP26 es un momento crítico para el clima, y CATF estará allí para abogar en el mayor escenario del mundo por los cambios necesarios para hacer frente al cambio climático, incluyendo el impulso de la próxima generación de tecnologías libres de carbono en el mercado y destacando la importancia de reducir las emisiones de metano en el primer pabellón de la COP dedicado al metano.
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Acerca de Clean Air Task Force
Clean Air Task Force (CATF) es una organización sin ánimo de lucro que trabaja para protegerse de los peores impactos del cambio climático catalizando el rápido desarrollo y despliegue mundial de energías bajas en carbono y otras tecnologías de protección del clima. Trabajamos para lograr estos objetivos mediante la investigación y el análisis, el liderazgo en la defensa pública y la asociación con el sector privado. Con casi 25 años de experiencia reconocida a nivel nacional e internacional en materia de políticas y reglamentos sobre el aire limpio y un compromiso feroz para explorar plenamente todas las soluciones potenciales, CATF tiene su sede en Boston, con personal que trabaja virtualmente en todo el Estados Unidos y en el extranjero.
